El realismo sucio encontró en Charles un hogar idóneo para desarrollarse como una de las corrientes literarias mas influyentes de los últimos tiempos. Se dice que es uno de los mundos literarios mas escritos del mundo, miles de escritores (muchos jóvenes, otros no tanto) se sumergen en un mundo de drogas y alcohol, para intentar llevar una vida maltrecha que les inspire a escribir historias desadaptadas y poemas sin frenos. Es evidente que no es un ejemplo de vida. Más bien es lamentable. Son más los alcohólicos que tienen ínfulas de escritor que los escritores que realmente padecen una enfermedad asociada al alcohol o las drogas.
Dejando aún lado toda esta porquería que abunda la vida de Charles Bukowski, encontramos aún poeta temperamental, sentimental y melancólico que dejo un legado diferente a muchos de sus colegas. Cartero por casi cincuenta años, abandona aquella profesión para subirse a las teclas de su maquina y escribir historias de amor, mal vivir y soledad. Entre sus poemas, encontramos libertinaje, malas composiciones, brillos y sombras pero sobre todo una personalidad intacta por la comercialidad.
En este post, les copio su poema dedicado a los noveles escritores:
¿Así que quieres ser escritor?
Si no te sale ardiendo de dentro,
a pesar de todo,
no lo hagas.
A no ser que salga espontáneamente de tu corazón
y de tu mente y de tu boca
y de tus tripas,
no lo hagas.
Si tienes que sentarte durante horas
con la mirada fija en la pantalla del computador
o clavado en tu máquina de escribir
buscando las palabras,
no lo hagas.
Si lo haces por dinero o fama,
no lo hagas.
Si lo haces porque quieres mujeres en tu cama,
no lo hagas.
Si tienes que sentarte
y reescribirlo una y otra vez,
no lo hagas.
Si te cansa solo pensar en hacerlo,
no lo hagas.
Si estás intentando escribir
como cualquier otro, olvídalo.
Si tienes que esperar a que salga rugiendo de ti,
espera pacientemente.
Si nunca sale rugiendo de ti, haz otra cosa.
Si primero tienes que leerlo a tu esposa
o a tu novia o a tu novio
o a tus padres o a cualquiera,
no estás preparado.
No seas como tantos escritores,
no seas como tantos miles de
personas que se llaman a sí mismos escritores,
no seas soso y aburrido y pretencioso,
no te consumas en tu amor propio.
Las bibliotecas del mundo
bostezan hasta dormirse
con esa gente.
No seas uno de ellos.
No lo hagas.
A no ser que salga de tu alma
como un cohete,
a no ser que quedarte quieto
pudiera llevarte a la locura,
al suicidio o al asesinato,
no lo hagas.
A no ser que el sol dentro de ti
esté quemando tus tripas, no lo hagas.
Cuando sea verdaderamente el momento,
y si has sido elegido,
sucederá por sí solo y
seguirá sucediendo hasta que mueras
o hasta que muera en ti.
No hay otro camino.
Y nunca lo hubo.
Lanzar los dados
Si vas a intentarlo, ve hasta el final.
De otra forma ni siquiera comiences.
Si vas a intentarlo, ve hasta el final.
Esto puede significar perder novias,
esposas,
parientes,
trabajos y,
quizá tu cordura.
Ve hasta el final.
Esto puede significar no comer por 3 o 4 días.
Esto puede significar congelarse en la banca de un parque.
Esto puede significar la cárcel.
Esto puede significar burlas, escarnios, soledad…
La soledad es un regalo.
Los demás son una prueba de tu insistencia, o
de cuánto quieres realmente hacerlo.
Y lo harás,
a pesar del rechazo y de las desventajas,
y será mejor que cualquier cosa que hayas imaginado.
Si vas a intentarlo, ve hasta el final.
No hay otro sentimiento como ese.
Estarás a solas con los dioses
y las noches se encenderán con fuego.
Hazlo, hazlo, hazlo.
Hazlo.
Hasta el final,
hasta el final.
Llevarás la vida directo a la perfecta carcajada.
Es la única buena lucha que hay.
Un escritor maldito. Pero único
ResponderEliminarPresentaba sus poemas en foros universitarios mientras se emborrachaba. A veces ni los podia leer y lo sacaban a arrastras del escenario
ResponderEliminar